Factura de servicios
La Factura de servicios es el comprobante fiscal expedido por una persona física que presta sus servicios profesionales.
¿Qué es la Factura de Servicios? – Concepto y Uso
La Factura de servicios profesionales es un tipo de CFDI conocido popularmente como «Factura de honorarios» y que debe ser emitida por todos los contribuyentes que pertenecen a este régimen.
En esta categoría entran aquellos individuos que no forman parte de la definición de «trabajador» porque no son asalariados, es decir que no pertenecen al Régimen Fiscal de Sueldos y Salarios, sino que generan ingresos por sus actividades profesionales autónomos.
¿Quiénes deben emitir el CFDI de Servicios Profesionales? – Características
En primera instancia, los emisores del CFDI de Servicios deben ser personas físicas, pues las personas morales (empresas) expiden otros tipos de facturación electrónica.
Dentro de este Régimen Fiscal se engloban aquellos profesionistas que cobran por un servicio que realizan en favor de alguien más, sin que exista una relación permanente o de subordinación. Usualmente se les conoce como freelancers.
Ejemplos puede haber tantos como profesiones diferentes. Un escenario sería una arquitecta que realiza proyectos independientes sin pertenecer a un despacho mayor de arquitectos. O bien, un diseñador gráfico que realiza encargos publicitarios.
Receptores del comprobante de servicios
Por otro lado, los receptores de dichas facturas, que son a quienes prestan sus servicios los profesionistas, pueden ser otras personas físicas, personas morales o dependencias de Gobierno.
Quizás los casos más comunes sean los contadores que llevan a su cartera de clientes, los abogados que hacen lo propio, así como los médicos cuando rentan consultorios particulares (a diferencia de aquellos que trabajan para instituciones de salud, como el IMSS).
Deducciones para el Régimen de Profesionistas – Beneficios
Los gastos que son deducibles para esta figura son aquellos necesarios en el desempeño de sus funciones o el mantenimiento de su oficina, como pueden ser:
- Alquiler del inmueble empleado como oficina.
- Compra de bienes para el inmueble.
- Mantenimiento del inmueble (pintura, plomería, entre otros).
- Gastos de luz, teléfono, agua y limpieza del local.
- Artículos de limpieza y cafetería.
- Equipo de transporte e inversión en automóviles, incluyendo el seguro.
- Gasolina y taxis.
- Equipo de cómputo.
- Papelería y artículos de oficina.
- Recargas telefónicas.
- Capacitación profesional (cursos, talleres, idiomas).
- Pagos en restaurantes.
- Gastos médicos.
- Impresión en tarjetas de presentación, publicidad en internet y o en papel.
- Honorarios por recibir servicios contables, legales, médicos, dentales, etc.
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